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Actualidad FIFA y UEFA
El sueño cumplido de cinco entrenadores modestos
En el fútbol no siempre hace falta haber sido cocinero para llegar a fraile. José Mourinho y Rafa Benítez son los dos grandes ejemplos, rompiendo todos los moldes establecidos. Con pasados modestos como futbolistas, ambos se han erigido entre los más grandes técnicos de las dos últimas décadas. A pesar de sus diferencias dentro y fuera del campo, los dos comparten más de un punto en común, entendiendo el fútbol desde un punto de vista estratégico, siempre con una óptica analítica. El éxito llega a través del trabajo. No hay otro camino.
Muchos kilómetros en la mochila
Como si de un cuento de hadas se tratara, cinco banquillos de los 32 equipos del próximo Mundial de Brasil estarán ocupados por entrenadores que no fueron futbolistas profesionales. Si llegar a ser seleccionador de un país es complicado, aún lo es más cuando no te acompaña ningún nombre. ?Muchas veces se cree que por haber sido un buen jugador también tiene que ser buen entrenador, pero no siempre ocurre?, me comentaba Luis García, entrenador del Getafe, en una entrevista (saldrá este mes en Fútbol-Táctico) en la que hablamos sobre este tema. Carlos Queiroz (Irán), Reinaldo Rueda (Ecuador), José Luis Pinto (Costa Rica), Alberto Zaccheroni (Japón) y Jorge Sampaoli (Chile) son los cinco entrenadores que nunca llegaron a jugar al fútbol de manera profesional. Sus sueños comenzaron desde un pupitre y con un cuaderno de notas en la mano, aprendiendo de los mejores, como el caso del portugués Carlos Queiroz, ayudante de Sir Alex Ferguson en el Manchester United. Otros, como Zaccheroni, forjaron una gran carrera en solitario desde la base. Debutó como entrenador en 1983 en el modesto Cesanatico Chimicart para llegar a la Juventus, Inter y Milán, siendo uno de los pocos técnicos transalpinos que ha entrenado a los tres grandes de Italia. Desde 2010 vive una nueva etapa en Japón, selección a la que intentará llevar más allá de octavos (los ?samuráis? nunca han pasado esta fase) en Brasil. Armas no le faltan.
Muchos más modestas han sido los caminos de José Luis Pinto y Reinaldo Rueda. El primero, tras recorrer casi toda Sudamérica, ha cumplido con una quimera: llevar a Costa Rica a su segundo Mundial. Los ?ticos?, sin embargo, han tenido la peor de las suertes en el sortero: Uruguay, Italia e Inglaterra serán sus rivales. Distinta ha sido la carrera de Reinaldo Rueda, nacido en Colombia, nacionalizado hondureño y actualmente seleccionador de la siempre peligrosa selección ecuatoriana.
Sampaoli, alumno de Bielsa
Otro técnico ?extranjero? será el argentino Sampaoli, quien intentará dar la machada con Chile, una selección que a buen seguro dará problemas a España y Holanda, las dos finalistas del último Mundial. La carrera de Sampaoli se truncó cuando apenas estaba comenzando: rave lesión de tibia y peroné le obligó a dejar el fútbol a los 19 años. Como no podía ser de otra manera, Sampaoli se ha declarado fiel seguidor de Marcelo Bielsa y su manera de entender el fútbol, donde siempre prima el ataque, con un esquema de juego casi temerario: 1-3-3-1-3. Su mochila de viaje está llena de experiencias y kilómetros, empezando por Perú y acabando en la selección chilena.
Parreira, el único campéon del mundo
El entrenador brasileño tocó el cielo en 1994 cuando llevó a la ?canarinha? a ganar su cuarto Mundial en una final de infarto contra Italia. Fue el sueño cumplido de un joven que se decantó por ser entrenador viendo ganar a Brasil en 1970. Parreira entró a la historia del fútbol mundial, siendo el primer entrenador no profesional que conquistaba la Copa del Mundo. Un hito que aún nadie ha podido igualar. Por si fuera poco, el entrenador brasileño estuvo presente en cinco mundiales más: Kuwait 1982, Emiratos Árabes Unidos en 1990, Arabia Saudí en 1998, Brasil en 2006 y Sudáfrica en 2010.
Por Héctor García
