Ver más reportajes

Ronaldo, hoy en día embajador del Mundial de 2014, ha vivido grandes derrotas, pero ninguna tan amarga como la de la final del Mundial de 1998. París y el mundo entero ardían a pocas horas de la final soñada: Francia, la anfitriona, contra Brasil, una colección de estrellas. Los galos habían llegado a ‘su’ final tras superar con comodidad la primera fase: nueve puntos, nueves goles a favor y sólo uno en contra. Brasil, por su parte, pinchó en el último partido ante la sorprendente Noruega.

Los octavos de final depararon situaciones distintas. Mientras Francia tuvo que llegar hasta el tiempo extra para eliminar a Paraguay (1-0), la ‘canarinha’ pasó por encima de Chile (4-1). Precisamente en ese partido comenzó a emerger el mejor Ronaldo, algo desparecido en la ronda anterior, en donde sólo pudo hacer un gol ante Marruecos. El futbolista brasileño mandó para casa a Chile (con Marcelo Salas y Zamorano) con dos goles en la segunda mitad. Ambos mostrando su devastadora potencia. Posiblemente la persona que mejor definió el juego de Ronaldo fue Jorge Valdano, quien dijo que el brasileño era “una manada de búfalos en estampida” cuando arrancaba.

Ronaldo, hoy en día embajador del Mundial de 2014, ha vivido grandes derrotas, pero ninguna tan amarga como la de la final del Mundial de 1998. París y el mundo entero ardían a pocas horas de la final soñada: Francia, la anfitriona, contra Brasil, una colección de estrellas. Los galos habían llegado a ?su? final tras superar con comodidad la primera fase: nueve puntos, nueves goles a favor y sólo uno en contra. Brasil, por su parte, pinchó en el último partido ante la sorprendente Noruega.

Los octavos de final depararon situaciones distintas. Mientras Francia tuvo que llegar hasta el tiempo extra para eliminar a Paraguay (1-0),  la ?canarinha? pasó por encima de Chile (4-1). Precisamente en ese partido comenzó a emerger el mejor Ronaldo, algo desparecido en la ronda anterior, en donde sólo pudo hacer un gol ante Marruecos. El futbolista brasileño mandó para casa a Chile (con Marcelo Salas y Zamorano) con dos goles en la segunda mitad. Ambos mostrando su devastadora potencia. Posiblemente la persona que mejor definió el juego de Ronaldo fue Jorge Valdano, quien dijo que el brasileño era ?una manada de búfalos en estampida? cuando arrancaba.

Francia sufre, Ronaldo brilla

Francia 1998 llegó en el mejor momento del ?crack? brasileño. Su primer año en el Inter fue espectacular, con 34 goles en 47 partidos. Una cifra al alcance de muy pocos en una Serie A que, por entonces, era el mejor campeonato del viejo continente. A pesar de todo, Ronaldo no pudo ?mojar? en los cuartos de final ante Dinamarca, más correosos de los esperado para los pupilos de Zagallo. El resultado final fue de 3-2, con Brasil casi pidiendo la hora. Sin embargo, tuvo poco que ver con lo de Francia. La selección anfitriona se lo jugó todo en los penaltis ante Italia. La moneda, para alivio del país, salió cara. Blanc, capitán de los ?bleus?, marcó el penalti decisivo.

El desgaste de los partidos pasó aún más factura a ambas selecciones en semifinales. La Croacia de Suker estuvo muy cerca de amargarle la fiesta a los franceses, quienes se salvaron con un goleador inesperado: Thuram. El ex de Mónaco, Parma Juventus y Barcelona no marcó nunca más en su carrera dos goles en un mismo partido. Es más, sólo hizo diez tantos en toda su carrera como jugador.  Un día antes del encuentro de la anfitriona, Holanda y Brasil brindaron al público uno de los mejores partidos en la historia de los Mundiales. Ronaldo abrió el marcador en una espectacular acción y Kluivert, en el 87, mandó el partido a la prórroga. Finalmente la suerte de ambos se decidió desde los onces metros, con toda la fortuna del mundo para Brasil.

¿Ataque cardíaco?

Francia y Brasil, las dos mejores selecciones del momento, por fin cruzaban su camino. Pero horas del encuentro el guion cambió de forma inesperada. Las noticias apuntaban a que Ronaldo había sufrido una descompensación en la concentración. Pero, ¿qué ocurrió en realidad? Días después salió a la luz un posible ataque epiléptico. Una información que no fue ni confirmada ni desmentida por la Federación y el propio jugador. El hermetismo sobre aquel episodio fue total, hasta que  Bruno Caru, afamado cardiólogo que atendió a Ronaldo tras lo ocurrido en el Mundial de Francia, desveló en 2012 en La Tribu del Calcio, un programa  de Mediaset , que el jugador sufrió un ?ataque cardíaco?. ?Ronaldo estaba en la cama siguiendo una carrera de Fórmula 1 y una inclinación artificial del cuello comprimió el glomus carotídeo, un órgano secretor responsable de regular el ritmo cardíaco y la presión arterial. La frecuencia cardíaca tuvo una caída que le provocó el desmayo y las convulsiones?, explicó el médico, quien añadió que las pruebas realizadas al jugador tras su regreso de Brasil reflejaron  ?un ritmo cardiaco de 18 latidos por minutos, lo que significa que durante ese periodo no había tenido prácticamente ninguna actividad eléctrica ni mecánica en el corazón?.

Por Héctor García

Fotos by gettyimages.es

Ver más reportajes