El Tottenham Hotspur sueña con poder asaltar este año la Premier League. Solo ha ganando la competición inglesa en dos ocasiones, la última en la temporada 1960-1961, años en blanco y negro donde los Spurs se hicieron grandes.
La oportunidad la tiene ahora gracias al gran trabajo de Mauricio Pochettino, sobre el que hay abierto un gran debate: ¿es bielsista o no? Entre ambos hay una relación personal, que comenzó cuando Pochettino apenas era una prometedora figura del fútbol argentino. Él no se acuerda del día, pero sabe que tenía 13 años y que dormía como un tronco cuando su padre lo despertó ante la llegada de un desconocido.
Eran las 2 de la mañana y un señor que se identificó bajo el nombre de Marcelo Bielsa se presentó en la casa de los Pochettino para comprobar lo que había escuchado durante su recorrida por los pueblos santafesinos: allí vivía un futuro crack. La anécdota, una leyenda urbana en las calles de Rosario, la confirmó tiempo atrás el propio Mauricio Pochettino en una entrevista con el Diario El Mundo: "Marcelo Bielsa era entonces la mano derecha de Jorge Griffa, director de la academia de Newell's Old Boys