Muchos somos los que pensamos que el mejor espectáculo futbolístico del mundo se llama Premier League, muy a pesar del LaLiga española. Una competición que cada año se inicia con muy diferentes candidatos al título de campeón.
El máximo dominador los últimos años ha sido el Manchester City de Pep Guardiola, incluso batiendo récords y de una forma aplastante. Coincide esta editorial con el análisis extenso y exhaustivo que este mes nos trae nuestro gran analista Pablo Petreñas, que nos desgrana el modelo de juego del vigente campeón inglés.
Pero cada vez más la hegemonía de los clubes dominadores es más corta en el tiempo. Y al City de Guardiola le ha aparecido un contrincante de categoría, el Liverpool de Jürgen Klopp.
El Liverpool es el actual campeón de la Champions League, la gran asignatura de Guardiola y también el dueño de la Supercopa de Europa. Guardiola, desde que dejo el FC Barcelona de Leo Messi, no ha conseguido el máximo galardón europeo, pese a sus intentos con el Bayern y con el Manchester City. Ni tan siquiera se ha asomado a disputar una gran final. Los ¨Reds¨ por su parte le han cogido al dedillo el hilo a la máxima competición europea, perdieron con el Real Madrid la edición anterior y en la última despacharon al Tottenham de Mauricio Pochettino.
La temporada pasada ya fue un aviso de lo que podía acontecer en la actual. En una lucha titánica, el City se llevó el título con un margen pequeño de solo punto sobre los de Klopp. Era un aviso hacia lo que podría ocurrir en la actual temporada. Mientras los de Guardiola perdieron durante el campeonato cuatro partidos, los del técnico alemán solo perdieron un partido, además, fueron el equipo que menos goles encajo en la Premier League, con tan solo veintidós goles en contra en treinta y ocho partidos.
La lucha este año comenzó en la Community Shield, el primer torneo de la temporada en Inglaterra, se la llevaron los Cityzens, pero para doblegar al Liverpool debieron recurrir a la tanda de penaltis.
Esta fuerte rivalidad no solo se limita a ambos clubes, incluso la rivalidad más fuerte esta entre sus entrenadores, dos excepcionales dominadores de la táctica y la estrategia que sin duda han dado mayor nivel a la Premier: Guardiola y Klopp.
Jurgen Klopp, ha ocupado el lugar que siempre correspondía a José Mourinho como máximo oponente del catalán.
La rivalidad entre ambos viene de lejos, cuando en el año 2013, Pep llegó a entrenar al Bayern Múnich, Klopp era el máximo responsable del Borussia Dortmund.
La relación entre ambos técnicos es difícil y muy competitiva. No solo se limita al terreno de juego. Los cruces de declaraciones, eso si, muy diplomáticas y sibilinas siempre están presentes en sus enfrentamientos.
Son los dos mejores equipos de la Premier, y el Liverpool para envidia de los de Guardiola se han convertido en los Reyes de Europa.
Su modelo de juego es distinto y practican un fútbol totalmente diferente. En el plano ofensivo un técnico (Guardiola) apuesta siempre por el control, sin importarle el tiempo para llegar a la portería contraria mientras el otro (Klopp) desprecia en mayor número de ocasiones el tiempo y practica un fútbol muchísimo más dinámico y vertical. Sin embargo, en algo si coinciden ambos, el estilo defensivo, la importancia de no ceder la iniciativa al rival y la perdida presión del balón inmediata tras perderlo.
En el último enfrentamiento entre Guardiola y Klopp, el catalán salió vencedor. En total se han enfrentado en 17 ocasiones, la igualdad entre ellos es total, ocho victorias para el alemán y siete para Guardiola, con dos empates entre ambos.
El City busca un tricampeonato histórico, y la ansiada Champions League. Los Reds recuperar una corona inglesa que hace tiempo no conquistan y sumar su séptimo entorchado en Europa, lo que acercaría a Klopp al mítico Bob Paisley, ganador de 3 Copas de Europa.
Las motivaciones para ambos son totales, no olviden apuntar en la agenda, que el próximo 10 de noviembre tendrán un nuevo capítulo del enfrentamiento City-Liverpool o si lo prefieren, Guardiola-Klopp.