El uso de vídeos motivacionales se ha extendido en los últimos años. Entrenadores y clubes del fútbol profesional y modesto los utilizan, cada vez más, como un recurso para aumentar el compromiso de jugadores y afición. Estos últimos suelen ser los protagonistas, pero también han participado lobos, leones, personajes de ficción dando discursos inspiradores y hasta deportistas haciendo de guerreros, pintándose la cara antes de salir a luchar.
Recientemente, un futbolista personificó a un herrero forjando el escudo de su equipo. Ha llegado el momento de las eliminatorias y en breve los agónicos finales de temporada, y con estos, los vídeos que auparán en situaciones de presión. La pregunta es: ¿Ante estos partidos siempre se debe motivar? Y la respuesta es no, no siempre. Depende del equipo y de la situación. Este artículo analiza las magníficas prestaciones que nos ofrecen este tipo de recursos y las distintas formas de utilizarlo para mentalizar de forma adecuada a los equipos de fútbol.