Guardiola en Múnich, Mourinho en Londres, Ancelotti en Madrid
Los banquillos europeos se han renovado en un intercambio de cromos poco visto antes. Aire nuevo que, por otro lado, se agradece. Y es que los cambios siempre generan nuevas expectativas. Sólo Tito Vilanova se mantiene en el banquillo de uno de los grandes. El entrenador azulgrana, tras un primer año muy duro, está dispuesto a fortalecer el nuevo proyecto del Barcelona. Neymar y Messi juntos. Sueños infinitos, menos para Johan Cruyff, una de las voces más autorizadas del barcelonismo. El holandés apuntó a comienzos de verano que el Barcelona debería vender a Messi una vez que tiene a Neymar. Hasta el mejor escribano echa un borrón
A Madrid ha llegado Carlo Ancelotti, del que muchos apuntan que su carácter es parecido al de Vicente del Bosque. Entrenador de jugadores señalan otros. ¿Y los demás de qué son? Pregunto yo. La única gran verdad sobre Ancelotti es que es un gran entrenador, camaleónico: ha sido el entrenador de Berlusconi, de Abramóvich y del jeque del PSG. Personajes todos ellos singulares en el mundo del fútbol. Ahora le tocará lidiar con Florentino Pérez. Al italiano tampoco parece importarle llegar al Madrid después del paso de Mourinho. Ya lo hizo en el Chelsea y los resultados fueron bastantes buenos: una Liga y una Copa en dos años. Su objetivo, como todos los que han llegado desde el finiquito a Del Bosque, es la Décima y jugar un fútbol ofensivo. Futbolistas tiene para conseguirlo, entre ellos Isco, un jugador de presente y, sobre todo, de futuro.
Mourinho, por su parte, vuelve al Chelsea. El luso ha pasado por Inter y Madrid en estos últimos años, pero en cierto modo su nombre siempre ha ido ligado al del club inglés. El Chelsea es Mourinho y viceversa. La Premier es el hábitat perfecto para el entrenador portugués, donde se encontrará con un viejo conocido, Manuel Pellegrini, que toma las riendas del Manchester City. El tercer entrenador de renombre en la Premier es el de David Moyes, que se hace cargo del United.
Pero ninguno de ellos logró igualar la presentación de Pep Guardiola. El de Santpedor se ha convertido en algo más que un entrenador. Es un icono cultural y social. La portada de un medio alemán el día después de su presentación reflejaba el sentir de los alemanes: Guardiola era Superman. Su rueda de prensa en un lento, pero correcto alemán fue como comenzar ganando el partido 2-0. La gente no necesito ver más: Guardiola es lo que se esperaba. Su nuevo gurú. Un líder al que seguir dentro y fuera del campo. No les sorprenda si dentro de poco vemos a muchos alemanes con la cabeza rapada y un moreno eterno.
Todos estos cambios añaden aún más morbo a la Champions League. ¿Se cruzará Mourinho con el Real Madrid? ¿Y Guardiola con el Barcelona? El primer envite lo tenemos a finales de agosto, cuando Chelsea (Mou) y Bayern (Guardiola) se jueguen la Supercopa de Europa. Dos estilos válidos y atractivos. Y es que la derrota de España en la Confecup nos enseñó que todos los caminos son buenos. No siempre el jogo bonito gana títulos. Brasil, con un fútbol que roza por momentos el catenaccio, barrió a España del mapa. Un aviso para La Roja de cara al 2014 y un gran paso para la canarinha, que vuelve a estar entre los más grandes del escenario internacional.