“Tuve una conversación con la Federación de Fútbol de Canadá y acepté un reto que me parecía muy atractivo”. Un año después, Benito Floro destaca su experiencia en el fútbol canadiense como “muy positiva en todos los órdenes”. El objetivo está claro: clasificarse para el Mundial de 2018.
“Mi contrato está supeditado a la conquista de esa clasificación, pero no a que ambas partes libremente decidamos seguir juntos aunque no consiguiese la meta”, explica el técnico español, un auténtico trotamundos del fútbol. Japón, Marruecos, México o Ecuador han sido otros de los países por lo que ha pasado, siempre adaptándose a la condiciones del entorno. “Yo no tengo ningún modelo de juego particular”, apunta. Benito Floro nos habla también de su etapa en el Real Madrid, el Albacete y su visión del fútbol, como él mismo dice, siempre de un punto de vista “sintético”.