En la planificación de los entrenamientos para fútbol un buen diseño del Microciclo permite al futbolista asimilar la carga y llegar a la competición en las mejores condiciones. El ejercicio, como parte del microciclo, es desde nuestro punto de vista, el elemento más importante de toda programación. Si los ejercicios no son buenos, el jugador no aprende, no se entrena, se aburre, de nada sirve la dinámica de cargas semanal, el jugador debe entrenar en cada momento del entrenamiento, necesita “vivir el momento”. En las últimas temporadas buscamos sobretodo ejercicios que entrenen, ejercicios dirigidos al modelo de juego que pretende el entrenador, ejercicios motivantes, ejercicios que física y fisiológicamente preparen al jugador para la carga del partido, ejercicios donde el jugador entre, “se meta” y esté a gusto, que tenga claro para que sirven, que tengan la recuperación justa y no más, que les obligue a jugar rápido, a actuar más que a pensar, a realizar un esfuerzo extra. Evidentemente cada día de la semana requiere un tipo de trabajo, por ello, es muy importante ordenarlos para permitir recuperaciones y supercompensaciones óptimas. Los ejercicios que proponemos a continuación se han llevado a la práctica muchas veces, ¡y funcionan!, cumplen los objetivos anteriormente mencionados, de hecho cuando diseñamos un ejercicio si al entrenar observamos que no va bien, se modifica (más/menos espacio, más/menos balones, más/menos jugadores, más/menos tiempo, más/menos recuperación, etc.) hasta encontrar la situación perfecta para lo que pretendemos conseguir, que no es más que hacer que nuestros futbolistas consigan su mejor rendimiento y disfruten de su trabajo.