Una de las claves de la evolución de nuestro deporte en España ha sido la evolución de las defensas.
Desde los modelos defensivos totalmente reactivos, se ha pasado a modelos proactivos, que se desplazan en las trayectorias de los pases para presionar el balón. Esto ha hecho que, con tan poco espacio, si se controla la pelota en parado, el jugador está totalmente muerto. A partir de aquí, cobran importancia los controles en movimiento como fundamento clave del juego. De ellos vamos a hablar en este artículo.
por Adrí Martiño