Se trata de una de las lesiones más problemáticas, que cada vez aparece con más frecuencia en el fútbol sala: la rotura de ligamento cruzado anterior.
Hay seis lesiones de ligamento cruzado anterior por cada 100 jugadores de fútbol sala en un periodo de cinco años (Drobnic, González, & Martínez, 2004). Uno de los principales problemas en relación con el retorno a las actividades deportivas y el ejercicio físico tras la lesión del ligamento cruzado anterior, es la incidencia de recaídas o re lesión del ligamento y/o estructuras adyacentes (menisco, cartílago u otros ligamentos) (Ramos, F.J., Segovia Martínez, Martínez Melen, & Legido Arce, 2008).