Si alguien todavía no sabía por qué al grupo del Villarreal se le denomina 'el de la muerte', el Bayern se encargó ayer de recordárselo a todo el mundo. El equipo bávaro se impuso con solvencia gracias a su claro dominio del juego, pese a que Garrido le preparó una trampa poblando de efectivos la zona ancha, con Marchena acompañando a Senna y Bruno. Le salió mal la jugada al entrenador pues Kroos, que ayer volvió loca a la defensa local con su movilidad, abrió pronto el marcador, en el 6'. Rafinha, a 15 minutos del final, echó por tierra cualquier esperanza de la escuadra española de salvar los muebles.
Frente a la pelea en la medular que planteó Garrido, que se dejó a Cani en el banquillo descargando sobre las espaldas de De Guzman la responsabilidad de enlazar con los delanteros, el Bayern decidió hacer daño por los flancos. Müller y, sobre todo, Ribery, hicieron polvo el esquema defensivo del Villarreal. En una de las afiladas internadas del francés, se marchó de Mario, evitó una floja presión de Marcos Senna y entregó un pase atrás para que Kroos alojara la pelota en el fondo de las mallas.
La insistencia del internacional galo por la izquierda ponía en demasiados problemas a los amarillos, que solventaron la papeleta como pudieron en el primer tiempo. Incluso tuvieron una buena ocasión para empatar cuando, en el 20', Rossi encaró la portería pero su volea se encontró con una buena respuesta de Neuer. El Villarreal buscaba demasiado rápido al italiano y no encontraba tampoco a Nilmar. Con juego directo llegó la otra gran ocasión de los españoles: Mario recogió el balón, en un barullo tras un saque de falta lateral, e intentó hacer daño al meta visitante entre una maraña de piernas. Sin embargo, el arquero evitó el gol.
Tras el paso por los vestuarios, Heynckes realizó un movimiento inesperado al retirar a Mario Gómez, que llegaba de hacer ocho goles en tres partidos, para dar entrada a Petersen. Sabía lo que se hacía el ex entrenador del Real Madrid pues, en pocos minutos, el joven atacante alemán contó con tres clarísimas ocasiones de marcar. Sólo un gran Diego López evitó la debacle.
Avalancha. El dominio del Bayern era apabullante, con Ribery campando a sus anchas y Kroos buscando y encontrando las cosquillas de la zaga amarilla. Este último probó la consistencia del poste en el 68'. La resistencia del Villarreal se resquebrajó cuando Rafinha, otra de las novedades de los teutones este año, se permitió regatear con un 'túnel' a Bruno en el área local para, posteriormente, batir a Diego López. Era la lógica tras la gran superioridad de los teutones frente a un conjunto español que no tuvo su mejor noche en el máximo torneo continental.
El detalle: tres inicios, cero victorias
La lectura positiva para el Villarreal es que, en la 2005-06 y la 2008-09, superó una liguilla que nunca arrancó con victoria. En su primera participación, empató (0-0) en casa ante el Manchester United. En la segunda, los amarillos repitieron marcador y adversario, aunque en este caso en Old Trafford.
Fuente: www.as.com
Publicado en
Cursos el 15/09/2011